La abadesa participa personalmente en esta lucha entre el mal enjaulado dentro del bien del que emana un rayo de luz para iluminar la oscuridad. Una clara presencia de dos fuerzas contrastantes, el bien y el mal, separan el Espíritu de la Materia. Para el dualismo, los intereses espirituales no deben mezclarse con los materiales. ¿Esa mano que se mueve es una mano divina o la de la Abadesa? El visitante recibe una respuesta.
danilo santa
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Dónde está y cómo llegar (Referencia n.6)
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